¡Mi cuerpo es mío!
¡Mi cuerpo es mío! es uno de esos cuentos que mucha gente desecharía en cuanto lo ve porque el tema que trata es poco agradable, pero es uno de esos libros que se hacen imprescindibles porque hoy en día la sociedad tiene muchos más problemas de los que había antaño, o, por lo menos, los conocemos más.
Con ilustraciones de Dagmar Geisler muestra a una niña que se niega a aceptar muestras de cariño o darlas de o a gente que ella no quiere. En ningún momento se habla de manera directa de abuso, pero sí que les enseña a los peques que el control sobre su cuerpo es suyo propio y de nadie más.
La historia viene explicada por su protagonista, Clara, que nos cuenta, en primera persona lo que ella piensa de su cuerpo y sus reacciones frente a las muestras de afecto dependiendo de quien sean y como sean. Muestra de manera totalmente natural el hecho de negarse a recibir o dar muestras de afecto que no se quieren, y a disfrutar de aquellas que sí que gustan. No hay dramatismos, está tratado de una forma fácil y directa para que los niños lo entiendan y sepan que no tienen porque aceptar aquello que no quieren.
Además al final de la historia Clara nos dice que si alguien necesita ayuda en este caso debe contarlo a alguien en quien confíe.
Como madre este tema me parece muy preocupante y además de gran importancia. Los niños, desde muy pequeños, pasan muchas horas sin nosotros porque los padres están trabajando. Además, tienen que saber que hay cosas que son inaceptables incluso por parte de los miembros de su familia y/o amigos, y esto, para mi, es de gran importancia y deben saberlo desde bien pequeños, por mucho que nos pese tratar estos temas. Cuando compré este libro yo ya llevaba tiempo diciéndole a mi hija que su cuerpo era suyo y no tenía porque tocárselo nadie si ella no quería, al igual que le decía que no hay que tocarle nada a nadie si no queremos. Es muy importante hablar con naturalidad a los niños de los temas que nos preocupan porque, a veces, como padres que los vemos tan pequeños creemos que no nos entienden pero lo hacen mucho mejor de lo que nosotros creemos, y de hecho, en ocasiones, lo asumen con tal naturalidad que te dejan anonadado.
El libro se recomienda según la Editorial Juventud a partir de los 5 años pero yo creo que estos temas hay que tratarlos bastante antes, y a mi hija, que aún no ha hecho los tres años se lo mostraré en breve, porque, como os dije, del tema le hablo hace mucho tiempo.
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´María 19 October, 2016
Un tema escabroso pero imprescindible en la actualidad. Gracias por tratarlo.
Martha Alicia Granados 11 November, 2018
Un tema delicado que debemos tratar con mucho tacto. Gracias por ayudarnos a hacerlo más fácil,