Dulces sonrisas dormilonas

Dulces sonrisas dormilonas

Dulces sonrisas dormilonas es un libro de cuentos escrito por Nuria Espert Más, ilustrado por José Gabriel Espinosa y publicado por Babidi-bú Libros. Se trata de un volumen breve (en torno a unas 70 páginas de texto), que compendia tres cuentos independientes: Dulce mirada de chocolateLa ovejita dormilonaEl payaso Bruno.

Dulce mirada de chocolate narra la historia de Lucía, una niña que en su séptimo cumpleaños descubre que convierte aquello que mira en chocolate. El efecto no es duradero en el caso de las personas, de hecho sus padres son inmunes a él, pero sí en los objetos. A partir de ese momento, Lucía esconde sus ojos detrás de unas gafas de cristales multicolores, que evitan que su mirada produzca la transformación. Un día, su madre se adentra en el bosque en busca del consejo de las hadas, que la ponen a prueba antes de ofrecerle una solución al problema de su hija.

La ovejita dormilona cuenta la historia de una pequeña oveja que formaba parte de un rebaño guiado por un viejo perro. Los días transcurrían tranquilos y la oveja protagonista del cuento se caracterizaba por ser especialmente dada a quedarse dormida en todas partes. Un lobo viajero, de paso por aquellas tierras de camino a visitar a unos primos, se cruza con el rebaño y cree haber encontrado una presa fácil. Cuando está a punto de devorar a la pequeña oveja, su madre, el perro guardián y el rebaño salen en su ayuda, escarmentando al lobo y ganándose, sin saberlo, una fama que les librará de futuros ataques.

El payaso Bruno es el protagonista, junto con la bruja Avería, del tercero de los cuentos de Dulces sonrisas dormilonas. En él, conocemos la historia de un payaso capaz de hacer felices a los niños con unas bolas mágicas de colores que guardaba en una caja. La bruja Avería, celosa del payaso, roba un día la caja y descubre que, en sus manos, las bolas son negras y no tienen ninguna utilidad. Al saber que a Bruno le han robado sus bolas de colores, los niños y niñas del pueblo lloran amargamente. Tanto lloran que causan un profundo arrepentimiento en la malvada bruja, que lo transforma en una persona completamente diferente, en todos los sentidos.

El relato de los tres cuentos alterna pasajes narrados en prosa con otros rimados. El lenguaje es sencillo, propio de un título recomendado para primeros lectores, algo que queda reforzado cuando observamos que los textos están escritos en letra ligada. En este afán, podríamos decir que en ocasiones incluso pecan de excesiva sencillez. Surgen, tal y como explica la propia Nuria, de experiencias propias, estando en algunos casos relacionadas con narraciones orales para su hija. Se intuye en el paso a la narración escrita cierta relación con la ocupación de la autora, que trabaja con niños con problemas de comunicación oral y escrita en la localidad valenciana de Ontinyent, donde reside.

Las historias no están mal hiladas, pero les falta cierta consistencia por momentos. Encierran interpretaciones que refuerzan en el lector valores como la generosidad, la solidaridad o el arrepentimiento y el perdón. Personajes clásicos de cuento como lobos, hadas o brujas pasean por sus páginas, con pocas sorpresas: la bondad vence siempre a la maldad y los finales son felices. En el blog de la autora, http://nuriaespert.blogspot.com.es/, encontraréis fichas de animación lectora de cada una de las historias, materiales que serán de utilidad en el trabajo en el aula o como complemento en casa a la lectura de los cuentos.

A nivel de ilustración, el trabajo de José Gabriel Espinosa nos ofrece numerosas referencias de estilo e inspiración: Lucía podría ser un personaje de manga, las ovejas del segundo de los cuentos recuerdan, salvando las distancias, a los diseños de Antoine de Saint-Exupéry para El principito y la bruja Avería, antes de su transformación, tiene un cierto aire al Nosferatu de F.W. Murnau. Las ilustraciones se caracterizan por gruesos trazos exteriores y por su colorido. En el caso de Dulce mirada de chocolate, se combinan con fondos fotográficos con acusados efectos de desenfonque.

En cuanto a la edición se refiere, estamos ante un volumen de tapa blanda con solapas, con calidades normales de papel, que alterna páginas a color y en blanco y negro. El color se emplea en las ilustraciones principales de los cuentos, mientras que quedan en blanco y negro algunos diseños de transición, discordantes en su estilo, tanto entre sí como en el conjunto del libro. Tal y como indicábamos anteriormente, está escrito en letra ligada.

Al margen de la valoración literaria, nos ha llamado poderosamente la atención un detalle, que queremos remarcar en el final de esta reseña: los derechos que cobra Nuria Espert como autora del libro se destinan íntegramente a la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), para colaborar con la investigación del cáncer infantil. Un magnífico detalle que alabamos y aplaudimos.

¿Quieres comprar Dulces sonrisas dormilonas? 
Si quieres comprar este libro, te ofrecemos un enlace para que lo hagas en Amazon. No te vamos a engañar, es un link de afiliado y ganaremos una pequeña comisión con la venta. A ti no te costará más caro y a nosotros nos ayudará a mantener esta página funcionando. Si te interesa, puedes comprar Dulces sonrisas dormilonas en Amazon pulsando aquí.
logo

Related posts

Los intrusos

Los intrusos

Los intrusos es un álbum ilustrado escrito por Susanna Isern, ilustrado por Sonja Wimmer y que edita Tierra de Mu. SINOPSIS En este álbum encontramos una historia que habla de migración, pero también de empatía y solidaridad. Al mismo tiempo, habla de egoísmo y prejuicios. Es una historia...

50 cuentos para entendernos mejor

50 cuentos para entendernos mejor

50 cuentos para entendernos mejor, Antología de cuentos tradicionales es un libro que reúne cuentos clásicos de diferentes tradiciones del mundo, reescritos y adaptados por Teresa Durán, una prestigiosa narradora e investigadora. Acompañado de ilustraciones de Marion Arbona, y editado...

Llama destruye el mundo

Llama destruye el mundo

Llama destruye el mundo es una novedad de La casita roja Ediciones escrito por Jonathan Stutzman e ilustrado por Heather Fox Jonathan ama el queso y una vez casi destruye el mundo por los donuts. Además de escribir esta historia, está casado con la talentosa ilustradora de este álbum...

3 Comments

  1. Kalea 30 December, 2016
    Responder

    A mí y a mis conocidos nos ha gustado mucho el libro, personalmente lo recomiendo.

  2. Julia 5 January, 2017
    Responder

    Buscando fichas de inteligencia emocional encontré este cuento. En el colegio decidimos incluirlo en la programación de animación lectora, sobre todo por la aportación de actividades que la autora realiza en su blog. La experiencia fue todo un éxito. Los niños conectaron con las tres historias, y se lo pasaron realmente bien. Le debo a esta escritora el hecho de que me ayudara a replantear por completo la forma de programar las sesiones . Tras visitar y poner en práctica las actividades propuestas en el blog, la dinámica cambió por completo. Los alumnos respondieron muy bien y realizaron ilusionados las fichas que descargamos del blog. Gracias al cuento de “El payaso Bruno” la resolución de conflictos latentes que dificultaban la convivencia en clase. A nivel creativo las producciones delos niños fueron francamente buenas. Como libro, coincido en que parte de elementos tradicionales pero con acierto. Son lecturas entrañables y divertidas, que gustan mucho a los niños.
    .

  3. Juan 8 February, 2017
    Responder

    A mi hija le gusta mucho Dulces sonrisas domilonas, sobre todo La ovejita dormilona. Creo que son historias que de alguna manera captan la atención no sé si porque son a la vez tiernas y divertidas, o por la forma en que están escritas, eso se lo dejo a los críticos literarios como vosotros. Para mi este libro , simplemente, todo un acierto. y no sabía que tenía un fin solidario, más motivos para apreciarlo

Responder a Juan Cancelar la respuesta