Imaginario de vehículos y medios de transporte

Gracias a Literatura Infantil y Juvenil SM disponemos de un ejemplar del Imaginario de vehículos y medios de transporte de Anne-Sophie Baumann, ilustrado por Didier Balicevic, publicado originalmente en francés en 2016 y editafo en castellano desde el pasado mes de abril.

Se trata, como su nombre indica, de un imaginario muy concreto y específico, que aborda con todo lujo de detalles el aspecto y nombre de vehículos de distinto tipo, no necesariamente​ dedicados al transporte de personas.

El libro se estructura en torno a ocho bloques temáticos, que están relacionados con los vehículos de las obras, la maquinaria agrícola, los medios de transporte, los vehículos de mantenimiento y limpieza de la ciudad, los vehículos de los bomberos, las embarcaciones, los vehículos aéreos y, por último, los vehículos espaciales. No todos estos bloques se abordan con igual desarrollo, siendo con diferencia los más extensos y detallados los dedicados a los vehículos de las obras y a los medios de transporte.

La clasificación por bloques se complementa con la asignación de colores, marcados en una etiqueta en el margen superior de cada página, lo que permite acceder a los contenidos de forma sencilla. Dentro de cada bloque, además, se establecen categorías adicionales en función del tipo de vehículos: así, en el caso de la maquinaria de obras, se diferencian los dedicados a excavar, trabajar con hormigón o allanar el suelo, además de los camiones y las grúas. En el vídeo que os adjuntamos a continuación podréis ver un poco este sistema de clasificación y el aspecto del libro.

Las ilustraciones de Didier Balicevic son coloridas y muy detalladas, lo que permitirá que los niños y niñas se hagan una idea muy concreta de cómo es cada uno de los vehículos representados y reconocerlos fácilmente en caso de verlos en directo. Diseños planos y elegantes que serán del agrado de los más pequeños. Los fondos de página son sencillos, limitándose a ubicar cada objeto representado en el lugar en el que desarrolla habitualmente su actividad: el campo, la ciudad, el mar… A partir de este nivel de detalle, podemos jugar con las imágenes, de forma que los niños o niñas señalen las diferencias entre vehículos que se dedican a actividades similares, por ejemplo. A nuestro juicio, esta clase de imaginarios son una puerta abierta a profundizar en los temas que abordan: de esta forma, en el caso que nos ocupa, podemos ir viendo con más detalle cada uno de los vehículos representados, explicando su funcionamiento, relacionándolos con fotografías reales, identificándolos por la calle…

Podemos ponerle un pero al trabajo de ilustración, y es que peca de ser poco coeducativo. Los conductores de los diferentes vehículos representados reproducen mayoritariamente roles tradicionales. De esta forma, apenas encontramos una mujer al volante de maquinaria de construcción o del campo, por ejemplo. Alguna conductora más hubiera sido muy de agradecer.

En cuanto a la edición se refiere, estamos ante un volumen encuadernado en cartoné, con cantos redondeados y un total de 96 páginas, con un papel muy agradable al tacto. El volumen tiene una buena presentación, destacando el hecho de que los nombres de los vehículos se han reflejado en letra ligada, con lo que estamos ante un imaginario ideal para primeros lectores. De hecho, si bien el tramo de edad en el que se recomienda abarca de los 4 a los 6 años, nosotros lo encuadraríamos en la franja superior de dicho rango, por la especificidad de algunos de los vehículos representados. En todo caso, para niños y niñas con afición a este tema puede ser un título que de mucho juego, una obra de consulta cotidiana.